Introducción

La crianza establecida en el pasado lejano de la cultura andina mostraba una marcada especificidad y una mayor prosperidad del productor y su familia en un criterio de mayor bienestar de los animales, consecuentemente la protección del medio ambiente, con una producción sostenible a largo plazo.

Posteriormente, durante la conquista, las “tamas” fueron sacrificados para satisfacer las necesidades de la conquista; quedando considerablemente reducidos en pequeñas manchas poblacionales en algunas regiones de la franja andina.

El país de mayor importancia en la producción Llama es Bolivia que posee el 64% de llamas, el 12% de alpacas y el 18% de vicuñas a comparación de los países vecinos.

Desde hace varios siglos, el Altiplano sufre procesos de degradación ambiental por efecto combinado de varios factores como la introducción de especies exóticas, manejo de instrumentos de trabajo inapropiados en lo que la ganadería camélida continúa siendo una alternativa económica y ambientalmente para la extensa región andina.

Los camélidos en Bolivia

Los enormes macizos montañosos de la Cordillera Occidental y Oriental, desde los nevados perpetuos hasta los sedimentos de la cuenca altiplánica es el hábitat de los camélidos; la extensa cuenca se originó probablemente por la fractura en bloques durante la formación de los Andes. Actualmente está cubierta por sedimentos de lagos desaparecidos (Ballivián, Minchín, Tauca), y parcialmente desecados (Titicaca y Poopó); los restos de estos lagos testimonian dos grandes salares Uyuni y Coipasa. Espacio en que actualmente se cobija una importante variabilidad de ecotipos de los camélidos.

Las formas actuales ha evolucionado en cuatro especies de camélidos: Llama (Lama glama), Alpaca (Lama pacos), Vicuña (Lama vicugna) y Guanaco (Lama guanacoe); las dos primeras domésticas y las últimas salvajes. Las estadísticas de 1997 inventarió aproximadamente 2,8 millones de camélidos de los cuales 2,3 millones son llamas y 0,5 millones alpacas. La economía del sector camélido presenta una tendencia sostenida a incrementar su participación. En diez años el sector camélido duplicó su participación en el PIB de Bolivia pasando de contribuir con cerca de USD 25,2 millones en 1990 a una participación del orden de USD 48,7 millones en el año 2002. Esta participación está principalmente asociada a los sub sectores de ganadería y fibra con USD 16 millones cada uno, carne fresca y seca con USD 12 millones y cueros con USD 4,5 millones.

Camélidos

K'ara (Llama)
Llamas que presentan el cuerpo con un vellón ralo, este vellón esta distribuido en dos capas, una inferior y otra superior, las inferiores son las mas finas constituyendo la capa mas densa que cubre el cuerpo y las superiores que son mas gruesas y largas distribuidas con una densidad relativamente baja.

En Bolivia se tiene una población mayoritaria de esta raza con una población de 1.784.378 cabezas lo cual constituye el 74.4%. El departamento de Oruro es el que cuenta con mayor cantidad de animales de esta raza con 1.004.182 cabezas. (Censo Nacional de Llamas y Alpacas UNEPCA ,1997).

T'hampulli (Llama)
Llamas que presentan una cobertura corporal con un vellón denso y uniforme a lo largo de todo el cuerpo, este vellón es rizado y suave al tacto.

Ambas razas de llamas presentan una amplia gama de colores que van desde blanco hasta el negro, predominando el color marrón como el mas común dentro de los rebaños.

En Bolivia la raza T'hampulli tiene una población de 614.194 cabezas lo cual constituye el 25.6%. El departamento de Potosí es el que cuenta con mayor cantidad de animales de esta raza con 280.861 cabezas. (Censo Nacional de Llamas y Alpacas UNEPCA ,1997).